Es posible ahorrar combustible evitando cambios de marchas innecesarios?

Para muchos expertos en la materia, la forma de conducir nuestro vehículo es indispensable para tratar de ahorrar combustible, el utilizar una buena técnica en los desplazamientos que realizamos tanto en la ciudad como en la autopista, nos puede permitir ahorrar más de un 10 % de consumo.

Para poder conseguirlo se hace indispensable tener conciencia al respecto y lograr introducir estas nuevas ideas en nuestra hábito de conducir, quizás nada fácil pero tampoco imposible, sobre todo cuando estamos hablando no solamente de ayudar a ahorrar energía sino también de economizar algún dinero. En este artículo hablaremos de cómo reducir el consumo y de si es posible ahorrar combustible evitando cambios de marchas innecesarios.

Algunos consejos para el uso correcto de tu vehículo

Una de los consejos más importantes que debemos brindarte es que circules la menor cantidad de tiempo en la primera velocidad, la misma tiene un mayor consumo de combustible y realmente se utiliza para dar un impulso inicial al vehículo e iniciar la marcha. Intenta cambiar a la segunda velocidad unos tres segundos después o luego de haber rodado entre cinco y siete metros.

Otro de los secretos importantes que tiene esta técnica es estar pendiente de las revoluciones o del velocímetro del automóvil. Analicemos el primero, lo ideal sería que los cambios los ejecutemos en el momento que veamos que avanza de 2.000 a 2.500 rpm, siempre y cuando estemos hablando de motor a gasolina, ahora bien, si hablamos de motor diesel lo ideal es realizarlo cuando apenas pasamos las 1.000 rpm.

Los que están pendientes del velocímetro tienen un reto aún mayor, porque hay que concentrarse entre velocidad y la marcha que llevamos, para muchos coches puede ser el cambio de la segunda velocidad a la tercera cuando pasas los 30 kilómetros por hora, de tercera para cuarta los 40 km/h y así en la medida que subimos a 50 km/h deberíamos colocar la quinta y por último, la sexta que aparece a unos 60 km/h. Así que ya sabes que el control del pie en el acelerador y mantener la velocidad lo justo y necesario también influye en una conducción eficiente, levanta el pie cuando sea necesario y respeta estos límites de velocidad.

Si no ves el contador de revoluciones o de la velocidad no te preocupes, a la larga nuestro cerebro se acostumbra al sonido del motor y este tipo de cambios lo hacemos prácticamente por oído, es una cuestión de costumbre.

Otras recomendaciones adicionales para ahorrar combustible

Intenta mantener tu vehículo con una velocidad constante, realmente estar acelerando y frenando a cada momento obliga a aumentar el consumo de combustible, no es recomendable hacer los cambios a cada momento, ni tampoco estar arrancando a toda velocidad.

Otra opción que debemos tener en mente, es tratar en la medida de lo posible es evitar frenar el carro con el uso de las velocidades, realmente para eso está el freno, debemos calcular la distancia que hay entre nuestro vehículo y el objetivo para desacelerar, dejando que el propio roce de los cauchos con el asfalto junto con el mencionado freno, hagan su trabajo respectivo.

Finalmente y no es menos importante, debemos perder la mala costumbre de dejar nuestro vehículo encendido mientras estamos estacionados. Tenemos la sensación de que al estar el vehículo estático no consume nada de combustible, pero sabemos que la realidad es otra. Apagar el motor es la mejor opción.

Trata de recordar estos nuevos hábitos y aplicarlos la próxima vez que salgas en tu coche al trabajo o de paseo.